La taberna del pinzón azul
En el pueblo de Rieverd la calma comienza a reinar con la caida del astro solar. Solo un lugar se mantiene activo, la taberna más famosa de la región, La taberna del pinzón azul. El negocio es regentago por un hombre corpulento de avanzada edadayudado por una joven. Sus cabellos ondulados son negros como el ebano y sus ojos grises somo el metal.
En la estancia hay una veintena de viajeros, que descansan de las fatigas del camino. Todo estaba tranquilo, unos comian, otros bebian y otor cantaban al son de un laúd. La joven se pasó por una de las mesas recogiendo las jarras vacías, llamando la atención de un hombre musculoso. Este se levanta eufórico, sin perderla de vista mientras se aleja.
- Otra ronda tabernero y de paso que venga la muchacha. - dijo con una sonrisa llena de maldad. - Es hora de que la hija del difunto Braenyr pruebe varón.
- ¿Cómo? Fuera de mi local. grita el anciano, indignado, golpeando unajarra contra la barra, dejando todo en sielncio.
- Chicos ocuparos de él y tu, ven. - la mano del hombre le hizo un gesto. Varios de sus acompañantes van hacia el anciano cuchillo en mano. - Si no vienes, mataré a todos los presentes.
La muchacha se acerca temblorosa. Los ocupantes de las mesas apartan las miradas por miedo. Sólo un encapuchado, oculto en una esquina observa la escena. Al llegar ante el hombre, este coge un mechon de su cabello y lo huele. Agarra con las dos manos las ropas de la chica, antes de intentar romplerlos.
- Nos vamos a divertir. dice a la vez que tira de la tela. No se rompe, pero si recibe un rodillazo en sus partes íntimas, exhalando un grito de dolor, cayendo al suelo. - ¡Maldita! ¡Matadla y a todos los demás!
- No, ella se viene conmigo. - las palabras del encapuchado, ahora en pie, se ven respaldadas por el sonido de su espada al salir de la vaina. - Tiene espíritu guerrero. Venid si quereis impedirlo, el filo de mi espada tiene hambre. - se pone en guardia, viendo que le empiezan a rodear. - Chica, esperame afuera.
Continuara...
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